Tener o no un antivirus en tu ordenador puede significar que éste siga con vida o no. Hoy en día no tener antivirus es jugártelo todo a la ruleta rusa. Las alternativas en antivirus son muchas y variadas y dependen del valor que le des a tu información.
Los antivirus gratuitos siempre son lo primero en lo que pensamos, ¿si existe gratis por qué voy a pagar por ello?, pero ¿cuáles son sus principales características?
- Ofrecen una protección básica.
- Muchos de ellos tienen publicidad.
- Algunos descargan complementos para optimizar el equipo, que en la mayoría de los casos son falsos.
- Consumen más recursos de CPU y memoria.
- Falta de soporte técnico.
Windows 7, 8, 8.1 y 10 integran el Windows Defender de Microsoft, un antivirus “gratuito” (se paga con la licencia). Siempre contar con algún antivirus, aunque sea gratis, es mejor que no tenerlo.
La otra opción son los antivirus de pago:
- Ofrecen un extra de seguridad.
- Mejor servicio y protección. Protegen contra virus conocidos y son altamente eficaces a la hora de detectar nuevos virus.
- Incoporar control parental y protección contra el robo de identidad.
- Añaden tecnologías proactivas que protegen el equipo de amenazas “online”.
- Tienen departamento de Atención al cliente.